Llega el lunes y llega la responsabilidad de trabajar y tranquilizar un poco la euforia del fin de semana; ya sea con agua de mesa, con alguna que otra pastilla para la resaca, o simplemente estar “online” en la red social. Debo reconocer que soy un vicioso, un maniático de la red social y que duermo con la computadora portátil en mi cabecera y lo primero que hago al despertar, mucho antes de ir al baño, mucho antes de poner el pie derecho en el piso para que todo en el día salga bien y cortar unos cinco kilos de cabellos y aplicar unos cinco más de bases de maquillajes a mis clientas, es clickear en la red social, mi cuerpo se invade de esas burbujitas vacías (gastritis) cuando los banners rojitos indican que alguien te agrega o recibir algún mensaje o leer alguna novedad, algún chisme nuevo, algún video gracioso, o leer algo que llame la atención como por ejemplo, si alguien está en una relación... ¡Y bingo! (algarabía) mi amiga Mariafé está en una relación, lástima que la novedad no sea completa, porque no indican quién es el dichoso afortunado que salió tinkado (léase ganador de una lotería en Perú) con tremendo premio mayor. Pero si no te lo dijo la red social, te lo digo yo. Siempre me he preguntado qué suerte que tienen algunas personas para las relaciones, ya sean amorosas o amatorias. Algunos dicen: “La suerte de la fea, la bonita la desea” (en este caso me confundo para concretar quien es la fea) otros también dicen: “la suerte de las feas a las bonitas nos vale madre” (es la frase de la hermana de mi amigo Dante, linda ella preciosa, bonito apellido) o yo simplemente diría: “suerte de las perras” Bueno, hablando de bonitas ¿Comó Mariafé llegó a tener una relación? Tengo que reconocerlo y me siento un poco culpable, por todo lo que está aconteciendo y que de seguro va a dar mucho más que hablar y comentar en la red, por eso voy hacer un poco de memoria para tratar de armar este rompecabezas.
MARIAFÉ, Mariafé es voluble, pequeña, tiene la cara de niña inocente y buena, Mariafé es amiga de todos, de todos los chicos guapos de las redes sociales, como otras dos más compañeras suyas (Valya y Melina) que viven entre la capital y esta provincia, sólo basta agregar a un chico guapo entre catorce y veinticinco años y ellas los tienen agregados, ellas los tienen a todos en sus redes, ellas conocen a todos, pero ¿quién las conoce a ellas? Volviendo a Mariafé, a ella la conocí en casa de un diplomático amigo, fue por el año dos mil siete, finales, mujer divorciada dos veces y su última relación no fue precisamente con un hombre. Corrían los chismes, las historias de todos los personajes que se reunían de vez en cuando en casa de este guapo diplomático, los primeros chismes que supe de Mariafé fue por mi amiga Frida. Que había sido pareja sexual de muchos de los asiduos a las reuniones en casa de nuestro amigo diplomático, entre tragos y cenas también se comentaban todos los detalles de sus relaciones, algunos más candentes que otros, me contaron que hasta el baño de visitas de la casa de nuestro amigo diplomático había sido testigo de muchas cruzadas amatorias, que inclusive llegaron a esporádicas relaciones lésbicas con algunas treintonas también asiduas a las reuniones. Es que Mariafé sólo necesita tomar un trago, sólo uno (la inversión no es mucha para los interesados) trago que la mayoría de veces es auspiciado, la mayoría por un gran amigo nuestro, auspiciador oficial de nuestro círculo. Ella es de las que voltean a mirar chicos en la playa y se codea con Valya (ella es la que vive entre la capital y provincia) cada vez que un hombre se mueve, porque eso es lo importante para ella, no hay parámetros ni tipos específicos físicamente de un hombre, lo importante es que se mueva, que camine, no importa la edad para ellas, porque como conocedora de leyes, debería saber que incitar a relaciones con jóvenes de 14 años está penado y a esas personas se les llama pederastas o pedofílicos.
DANTE, Dante es un joven muy joven, apenas si llega a los veinte, lo conocí por su hermana en una de mis tantas salidas nocturnas, recuerdo que la pasamos súper bien esa noche, pero me quedó la duda, esas ganar de preguntarle a mi amiga, oye,¿ tu hermano es tarado? Dante tiene muy serios problemas de salud, problemas gástricos muy severos, por lo que está constantemente en cuidados o viajando a Lima para sus chequeos respectivos. Todo eso hablamos cuando nos conocimos, mucho antes que los tragos empiecen hacer efecto, esa noche intercambiamos también datos y después de haber intercambiado correos electrónicos y direcciones de red social de vez en cuando chateábamos. Cuando estuvo internado en Lima fue cuando nuestra comunicación se tornó fluida, pero yo siempre tenía mis dudas con respecto a él. Me contó muchas cosas, sus experiencias a sus diecinueve, un poco de su pasado, su niñez, de su relación actual que era toda una patraña, un supuesto romance para espantar a un ex de la que dícese ser su enamorada, de su bisexualidad y sus dudas al respecto, en fin, muchas cosas. Me di cuenta que Dante no es malo, no tiene malicia, pero si es vulnerable y manipulable, frágil, fácil.... y las dudas siguen al respecto: ¿tiene o no un tornillo flojo?
ELENA, a Elena la conocí en el dos mil seis más al norte de esta ciudad, chiquilla inocente sin calle, sin avenida y sin pasaporte, porque para ir a Bolivia sólo usó su DNI (documento nacional de identidad) Elena tiene la facilidad de llegar a la gente joven, por tal motivo era siempre “una buena punta” (lo dije con N) y no obstante siendo mi amiga intentó alguna vez jugarme chueco, pero sigue siendo mi amiga, y le atribuí su atrevimiento a la edad, pero fue ya tres años atrás. Les acabo de presentar al triángulo amoroso que tal vez yo mismo he creado, mis dos amigas de comportamiento ligero y mi amigo de quien ya saben lo que pienso. En mi afán de darle un poquito de sentido a mi vida y no ser tan plástico y superficial, como me lo dijo hoy un vecino de “La Clarke” pero sin llegar a la necesidad de surfear, o fumar marihuana como me dio a entender que era su real sentido de sentir la naturaleza y sentirse vivo, preferí entonces quedarme en lo virtual, ya no estoy en edad de drogas, por más suaves que estas quieran disfrazarlas. Entonces mi intención fue la siguiente: aparear a Elena y Dante, pero como Dante no conocía muy bien a Elena lo cité yo para salir un viernes nocturno, el plan obviamente era que Elena saldría con él y yo disculpándome de sentirme mal y estar cansado me quedaría en casa disfrutando de mis cosas “on line”. Y así lo hicimos. Y recordé que también había citado a mi amiga Mariafé a salir, pero como no es santa de mi devoción decidí no avisarle de mis cambios de planes, con la intensión de hacerle pasar al menos un minuto de mal rato, porque si no soy feliz, no lo será nadie (Rubí).Y así como dios los creo yo los junté esa noche a los tres, también había un individuo más que a mis letras no llegaron, un “nn”, esa noche larga y prolongada donde antes de la llegada del amor primero surgió el sexo, la orgía, el hotel barato en la av. Sánchez Cerro, el alcohol, y los juegos tontos de botellas so pretexto de desnudarse e iniciar entre tanta sórdida actitud una relación amorosa que la confirmé hoy al leer la red social, y pensé y recordé, yo debo ser culpable por presentar a Dante, un chico tranquilo de barrio humilde a mis amigas “lobas” treintonas solteronas ,porque una semana antes el trió no era entre Elena y Mariafé, sino entre La Periche y Elena, La Periche, otra treintona regia, solo basta ver su perfil de la red social y darle una “ojeadita” de sus fotos, en todas podemos ver una chica súper producida, súper fashion, guapa, sin ojeras gracias a su corrector de ojeras N35 de MAC, con unos increíble ojos color grises, ella es La Periche un pez en el agua entre las regias de la sociedad de esta provincia, lo que diríamos “nice” “cool” y entre sus amigas están siempre las mas ranqueadas “anfitrionas” de la ciudad, muchas de ellas clientas mías. Me olvidaba de un detalle, ah por cierto, por más cara de niña que Mariafé tenga, tiene treinta, aunque ella diga 24, usa base de maquillaje comprado en farmacia, aunque ella diga que es pantalla y filtro solar, se demora más de dos horas en la ducha, antes de salir de casa un fin de semana, y apenas quince minutos antes de salir de regreso con dirección a su casa, casa que por cierto no es suya, casa que es auspiciada por el gran amigo nuestro. Ese día después de la orgía me enteré que Elena regresó a casa a las siete de la mañana, me llamó por teléfono para decirme “¿adivina con quien se acaba de quedar en el hotel tu amigo Dante?” no sé por qué no me sorprendí, hasta lo intuí, igual maldije a Elena por haberme quitado el sueño tan temprano. Toda la semana Elena me llamaba y no me dejaba en paz al respecto y casi me obligaba a tomar cartas en el asunto, ser su ángel vengador, pero ¿qué podía hacer yo? Hacía una que otra cosa sin relevancia para que entienda que la apoyaba moralmente, le decía que Mariafé era una perra y yo haría hasta lo imposible para que Dante recapacite, es que desde el primer día que se conocieron Elena y Dante tuvieron su “encontrón”. Ya terminando el día lunes, no he podido comunicarme con Dante para confirmar la relación, espero cualquier respuesta, hasta un “¿qué te importa?” y pensaré como mi amiga Leslie que ahora es miss “¿merezco?”Lo peor de todo que no me sorprendería que mañana esté posteada Elena como pareja sentimental de Mariafé y es que ya nada me sorprende en cuestiones de amores, en redes todo es un enredo.
lunes, 22 de noviembre de 2010
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