sábado, 13 de noviembre de 2010
ANTES DE ILUSIONARTE
Entre pensar y dejar de hacerlo, o preferir dormir en esta noche de viernes, buscando torpemente un cigarro por las ropas sucias, con la esperanza de encontrarlo en un cenicero maloliente, entonces lo decido y empiezo a escribir. Escribir para no hablarlo o tal vez gritarlo con mi voz trémula de madrugada (crónico) ¿quién dijo que los ojos no mienten? ¿esa mirada es transparente? ... cursilerías, los ojos engañan igual que las palabras, que los afectos, y esos ojos mientras más oscuros son, más mentirosos (es mi teoría) porque en los ojos oscuros no podemos ver cómo se dilatan las pupilas al mentir. ¿cuántas veces tenemos que sentirnos mal para desengañarnos? ¿Cuántos golpes es necesario recibir para caer? Cuando todos lo ven, cuando todo es tan obvio, cuando es tan fácil abrir los ojos, despertar del sueño, darnos cuenta que las personas somos animales y lo que llamamos a veces carácter no deja de ser un instinto, un instinto animal que nos mueve, que mueve este mundo y esta sociedad, al diablo con las miradas sinceras, al diablo con las sonrisas tan tiernas ya hechas por inercia, practicadas a lo largo de los años de hipocresía, al diablo con las caritas lindas que los años acabarán destruyendo y convirtiendo en surcos de mañosería, arrugas que esconden en sus pliegues tantos años de mentiras, rostros manchados por el sol y la amoralidad, vacios, deformes, rostros sin nombre ni apellido, al diablo con las palabras y frases cúrsales... al diablo con todo. No puedes ser fiel y punto.
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y tu..... no puedes serlo y punto?
ResponderEliminarfirma:
Un infiel reivindicado.