A una semana de mi cumpleaños número treinta y cuatro, lo siento por los que tienen veinte, pero si me preguntan, si quisiera regresar a los veinte diría que no, que prefiero viajar en taxi que volver a subir al autobús, es que para todo hay una edad y yo ya no estoy para veinte, y es cómodo el conforte de los treinta, me la pienso cada fin de semana antes de salir a amanecerme y ahora prefiero el platinium que el vip, porque después de los treinta o ya eres alguien o eres “él” alguien independiente, con trabajo, casa, carro (automovil) no importa que todo esto sea a crédito en cuotas a veinte años.
Una de las complicaciones de mi edad y es por parte de mi trabajo es la interrelación que pueda tener con gente joven, muy joven aún, hasta menos de dieciocho, ya sean chicas o chicos, y la mayoría de casos es por cuestiones de mi trabajo, lo digo, porque me entero anoche que la mamá del tarado (COSAS DE REDES Y ENREDOS, 22 noviembre del 2010) estuvo por mi salón preguntando por mí, no sé si por la publicación que he hecho (porque no es jactancia ya tiene más de dos mil entradas y no me sorprendería que ella también haya leído lo que pienso de sus hijos) o quién sabe, quiere saber de la relación de su hijo con mi amiga Mariafé que le lleva mucho más de diez años, en realidad no lo sé y me contaron los aires e ínfulas que la mujer ésta tenía cuando fue a verme. Anoche he tratado de comunicarme con Dante (el tarado) o su hermana, pero sin resultado alguno, porque a pesar de trabajar con pelos y cabellos, éstos no se me pegan en la lengua y no tengo ningún problema en decir las cosas tales como son, y que perdonen Mariafé y Dante, pero ninguna policía de quinta va a venir a querer aclararme cosas a mi sin fundamento, porque celdas, ya las conozco y el proceso también. En todo caso, eso demuestra la clase de la familia, porque esos problemitas personales se deben aclarar en casa, de pésimo gusto ir aclarando las cosas de casa en casa, pero bueno tampoco voy a exigir más de ustedes, teniendo en cuenta la sencillez de educación y la carencia de tino para solucionar problemas.
Digo todo esto porque justamentente tengo una cita hoy, con una linda chica de apenas dieciséis años, y espero no tenga consecuencias esta mi salida con ella, lo digo por que ella es linda, de buena familia y porque conozco a la madre, lo digo porque ya quedamos en tomarnos un par de mojitos cada uno, lo digo porque ella es preciosa y sale con un actor muy conocido ex de otra amiga íntima de la tele, que dicho sea de paso perdí contacto con ella cuando me “hackearon” mi antigua cuenta en la red social.
Espero hoy poder aclarar tanta taradez para no dejar en este año que se va cuentas pendientes, ya sean económicas ya sean éstas cositas “globitos de aire” que aveces me causa tener conocidos de menos veinte y aveces tarados, no hay nada más que hacer, no hay nada como la base treinta, donde los problemas existenciales de los veinte son chiquilladas y malos entendidos.
martes, 14 de diciembre de 2010
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